Iván Duque, presidente colombiano, visitó la capital estadounidense por la delegación de Joe Biden en Caracas.
La reunión de la delegación gubernamental Joe Biden el fin de semana pasado en Caracas de Nicolas Maduro, el líder chavista al que consideran ilegítimo, sigue echando chispas en Estados Unidos. La Casa Blanca el jueves que aún no reconoció a Maduro como presidente legal y sacudió las negociaciones de considerar las sanciones a cambio de los presos o los acuerdos de petróleo en medio de la crisis energética de Ucrania. El mensaje sobre la liberación de dos estadounidenses en Venezuela no es una objeción al modo del traje o al criticar a los legisladores republicanos y los demócratas republicanos. El presidente de Colombia, Duque, visitó la capital total del conflicto de los Estados Unidos y confirmó su propuesta de la dictadura de Nicolas Maduro.
“No reconocemos a Maduro como líder de Venezuela, pero estaba deteniendo a ciudadanos estadounidenses y nuestra prioridad era traer a esos ciudadanos estadounidenses a casa” dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria. Psaki dijo el lunes que en la reunión del fin de semana se discutieron temas como la «seguridad energética». El jueves explicó que, al menos hoy, no hay conversaciones públicas sobre la importación de hidrocarburos de Venezuela o el levantamiento de las sanciones económicas que EE.UU. ha impuesto a la administración durante los últimos años.
El 23 de enero de 2019, Washington reconoció a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y exigió que Maduro renunciara al poder y celebrara elecciones justas. Biden, que mantuvo la política y las sanciones cuando llegó al poder hace más de un año, hizo públicas inesperadamente las imágenes la semana pasada, sorprendiendo al propio Guaidó y a la mayor parte del Congreso estadounidense. El senador Bob Menéndez, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, no ocultó su disgusto por la falta de información sobre el Capitolio este jueves. “[Maduro] no hizo nada para que nos ganáramos el derecho a trabajar con él”, insistió, y agregó que había aprendido de los medios.
Menéndez emitió las declaraciones luego de una reunión con el presidente Duque. El presidente colombiano evitó comentar el enfoque de Biden pero reiteró su postura «coherente». “Nos apegaremos a nuestra línea de política exterior, condenaremos la dictadura y llamaremos a Nicolás Maduro un criminal de lesa humanidad”, dijo, ofreciendo también vender petróleo colombiano tras la reunión entre la Casa Blanca y el venezolano. “Colombia hoy es un país con mayor capacidad de oferta de hidrocarburos que Venezuela”, dijo.
En una entrevista con periodistas el miércoles por la noche, un alto funcionario de la administración de Biden enfatizó que no estaba comprometido a levantar ninguna sanción a cambio de su liberación y que “no decidió” comprar petróleo de Venezuela. La pregunta es qué espera Maduro en Washington ahora.
