Luz Salgado Rubianes
La tuberculosis es un grave problema de salud pública, siendo una enfermedad infecciosa y altamente contagiosa que se transmite por el aire. El 2018 se enfermaron 10 millones de personas y fallecieron 1,6 millones, ubicándose entre las diez principales causas de mortalidad en el mundo.
La OMS estima que en el 2017 la región de las Américas presentó 282 mil casos, de los cuales el 19 % no fue diagnosticado o tratado. El mismo año murieron 30 mil personas.
En el Perú son 37,000 casos estimados, pero el MINSAregistró32,006 personas atendidas, generándose una brecha por la falta de una detección precoz. En comparación a los países de las Américas, el Perúocupael segundo lugar en número de casos estimados, el primer lugar de casos de TB resistente, y el segundo lugar en incidencia de TB en la población (135.2 por cada 100 mil).
La realidad exige actuar en los determinantes sociales de la salud como el acceso a la educación, alimentación, servicios básicos y empleo. Por ello, la respuesta debe ser integral y multisectorial con la participación de la empresa privada, sociedad civil y población.
El Congreso de la República puede contribuir en reducir los índices de TB desde sus funciones de representación, legislación y fiscalización. De esta manera, se aprobaron dos importantes herramientas: la Ley 30287y el Frente Parlamentario.
El año 2014 se promulgó la Ley 30287, Ley de Prevención y Control de la Tuberculosis en el Perú, cuyo objetivo es regular mecanismos de articulación entre sectores involucrados, garantizando la cobertura y continuidad de una política de Estado. La norma fortalece la rectoría del MINSA y permite la articulación de once ministerios con gobiernos regionales y locales.
Asimismo, en enero de 2017 se creó el Frente Parlamentario contra la Tuberculosis del Perú, para realizar seguimiento al cumplimiento de las normas y abordar agendas comunes con otros parlamentos. Luego de su instalación los congresistas nos comprometimos por abogar su priorización en la agenda nacional de salud.
En el marco del Día Mundial de la Lucha contra la TB, el Frente Parlamentario organizó la Mesa de Trabajo “Políticas de Atención Integral a Personas Afectadas por la TB”, teniendo como invitados al Defensor del Pueblo, la Ministra del MIDIS, funcionarios del MINSA, representantes de Gobiernos Regionales de Lima y del Callao, de la Municipalidad Distrital de La Victoria, así como de la Asociación de Personas Afectadas por Tuberculosis – ASPAT Perú.
El eje principal fue el Informe de Adjuntía de la Defensoría del Pueblo, que encontró deficiencias en los establecimientos de salud durante el proceso de atención a los pacientes y dificultades en la ejecución del programa de alimentación y nutrición.
Entre las conclusiones de la Mesa de Trabajo del Frente Parlamentario está la necesidad de evaluar el modelo de distribución de alimentos, la implementación de un registro único de casos, la actualización del Plan Estratégico Multisectorial y la intervención en los determinantes sociales.
Considero que es posible alcanzar la meta de erradicar la TB el 2030, porque es una enfermedad que tiene curación si los casos son detectados y tratados oportunamente.
(*) Congresista de la República
Co-presidenta del Frente Parlamentario de Tuberculosis de las Américas