Economista Alejandro Indacochea señala que empresas que reciben préstamo no deberían acogerse a la «suspensión perfecta» ni despedir a sus trabajadores. Pide revisar efectividad del programa.
El Gobierno para reflotar a las empresas afectadas a causa del nuevo coronavirus, lanzó el programa Reactiva Perú, donde destinó un fondo de S/ 30,000 millones a distribuirlos en préstamos entre las compañías para que puedan asumir el pago de panilla de trabajadores, o destinarlo a capital de trabajo, durante el estado de emergencia.
La característica del programa es que los préstamos serán devueltos con tasas de interés que bajas oscilan entre 0.5% y 1.98%, y con una cobertura del 80% al 98%, cuya garantía cubre un monto equivalente a tres veces la aportación a Essalud o un mes de ventas promedio mensual obtenidas el año 2019, siempre que no tengan deudas tributarias con la SUNAT.
Sin embargo, este apoyo estatal no ha llegado a las pequeñas y medianas empresas porque las entidades bancarias exigen procedimientos engorrosos y requisitos y protocolos inviables entre ellos un pagaré incompleto que debe ser suscrito por la ESF (Estado de Situación Financiera) a favor de COFIDE y otros que han impedido a las mypes puedan adquirir el financiamiento estatal las que en su mayoría están al borde de la quiebra total.
VOZ AUTORIZADA
Al respecto, el economista Alejandro Indacochea manifestó estar en contra que se otorgue el segundo paquete del plan Reactiva Perú que otorgará 30 mil millones de soles, que es el 25% de la ayuda total que el Gobierno está dando a la pandemia, sin tener en claro si se cumplió el objetivo de llegar a las mayorías de pequeñas y medianas empresas que urgen reflotarse para no quebrar.
Asimismo, sugirió ayer al Gobierno que antes de ampliar un segundo nivel de préstamos comprendido en el programa “Reactiva Perú” para otorgar S/. 30 mil millones de soles, realice una exhaustiva evaluación para verificar si ha cumplido o no, con los objetivos trazados de reflotamiento económico y financiero de las pequeñas y micro empresas del Perú.
“Una condición básica para Reactiva Perú sería que si un empresario toma un préstamo no pueda acogerse a la Suspensión Perfecta y despedir al capital humano afectado por la pandemia del Covid-19, porque contravendría el objetivo esencial del plan que invierte recursos del erario público y sería escandaloso que suceda lo que pasó en Chile, por ejemplo”, advirtió Indacochea.
Alejandro Indacochea recomendó que antes que amplíe un segundo nivel de préstamos del plan Reactiva Perú se evalúe si el apoyo llegó a las pequeñas empresas para recién poder ampliarlo. Dijo que el punto central es destinar recursos del Estado para compensar el daño que ha causado la pandemia, los que calculó en alrededor de 60 mil millones de soles.
“Hay que tener en cuenta que este recurso del Estado lo está dando como regalo, porque en el primer año no se cobrará el préstamo y al siguiente año la tasas de interés son muy bajas. Y el Estado asume todo el riesgo. Entonces, hay un orden de prioridad. Por ello la ministra tiene que informar al país si se cumplió el objetivo del plan económico”, opinó
TRÁMITES INNECESARIOS
Por su parte, el ex ministro de Economía, Ismael Benavides remarcó que la filosofía del programa “Reactiva Perú” es proteger el empleo de los trabajadores evitando que las empresas quiebren pero que en la ejecución los bancos se habrían demorado un poco, porque el Gobierno hizo trámites innecesarios a través de COFIDE.
“El BCR ha indicado que va a haber una segunda ola de préstamos con una suma de 30 millones de soles, pero como los bancos ya atendieron a los clientes que están en regla, esperamos que a partir de ahora se va poder atender a todas las pequeñas y medianas empresas que están en regla y puedan sustentar sus solicitudes, considero que esta vez se va a desembolsar los préstamos a las Mypes”, puntualizó Ismael Benavides.