Sus familiares evalúan un tratamiento psiquiátrico
El misterio que rodea la desaparición de Nicole Mesía Castro, una joven policía de 23 años, ha dado un giro inesperado con su repentina aparición en Cusco, luego de haber sido reportada como desaparecida el pasado 18 de abril. Su regreso a Lima, custodiada por varios oficiales, plantea más preguntas que respuestas sobre su paradero durante los últimos días.
Nicole Mesía Castro fue encontrada sentada en una banca en Cusco, en buen estado de salud, aunque se notaba visiblemente afligida al ser abordada por los oficiales. Sin embargo, el misterio persiste, ya que se sabe que antes estuvo en Ica, donde fue captada por una cámara de seguridad retirando dinero. Este detalle plantea interrogantes sobre los motivos detrás de su viaje y su paradero durante esos días.
La joven policía registra antecedentes patológicos en la Unidad de Salud Mental de la PNP, lo que sugiere que ha sido paciente psiquiátrico en el pasado. Esta información arroja luz sobre posibles problemas de salud mental que podrían estar relacionados con su desaparición. Además, sus familiares han expresado preocupación por su estado, describiéndola como ausente y desconectada de la realidad.
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Tras su llegada a Lima, Nicole Mesía Castro se dirigió a la sede de la Dirincri para declarar sobre los nueve días de ausencia, pero el enigma que rodea su desaparición aún no ha sido resuelto por completo. Sus familiares están evaluando la posibilidad de someterla a tratamiento psiquiátrico, lo que sugiere que reconocen la importancia de abordar cualquier problema de salud mental que pueda estar afectándola.
El caso de Nicole Mesía Castro es un recordatorio de la complejidad de las enfermedades mentales y su impacto en la vida cotidiana. Aunque su aparición ha traído un alivio temporal, queda mucho por entender sobre los eventos que llevaron a su desaparición y su estado actual.
