Diversos expertos no coinciden en cuáles fueron las causas para el desprendimiento de la masa de hielo
A finales del pasado enero, satélites de la NASA captaron una masa de hielo que se desprendió de la península Antártica. La superficie del objeto marino fue calculada en 325 kilómetros cuadrado, casi el mismo tamaño que la ciudad de Filadelfia.
Debido a este fenómeno, ocurrieron varios desprendimientos de icebergs en el glaciar Crane y varios de sus vecinos, pues el hielo marino dejó de apuntalar sus frentes. Según el reporte de la Columbia Climate School, la situación podría aumentar el nivel del mar, pues los glaciares hoy son “más vulnerables al deshielo y la aceleración hacia el océano”.
Según la escuela de investigación climática de la Universidad de Columbia, la causa del desprendimiento es la presencia de “aguas oceánicas más cálidas que la derritieron desde abajo”. A esto se le suma el agua de deshielo en su superficie, que también aceleró la pérdida de hielo.
Sin embargo, el profesor Stef Lhermitte, de la Universidad Técnica de Delft, tiene una opinión distinta sobre la causa del desprendimiento. “es difícil saber qué causó realmente la desintegración, ya que el hielo marino ya mostraba grietas antes de la ruptura”, señaló Lhermitte. A su parecer, la masa pudo ser un conjunto congelado de segmentos de hielo marino sueltos. Por tal motivo, cree que es muy probable que se haya desintegrado rápidamente apenas se separó.
Por otro lado, otros expertos sostuvieron que las temperaturas más cálidas del verano y el viento foehn llevaron aire cálido y húmedo a la región.