Y a “infidente” lo queman vivo
Lima sigue siendo conmovida por la actuación despiadada de sicarios, quienes en las últimas horas asesinaron, por separado, a un efectivo policial que se ha hallaba suspendido de sus funciones por razones disciplinarias y a un supuesto “infidente” que aparentemente espiaba para una banda rival, al que luego mataron y quemaron vivo.
En el primer caso, dos sicarios que se desplazaban a bordo de dos motocicletas lineales, dieron muerte en la mañana del miércoles, a balazos, al suboficial de la PNP, Brandon Roa Hurtado (26), en circunstancias que se desplazaba en su automóvil blanco, de placa AJW-347, por la avenida Revolución, en Comas.
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El efectivo policial se encontraba acompañado de su esposa e hijos, los que felizmente no fueron alcanzados por al menos 10 balazos disparados por los sicarios.
Tras los disparos, los transeúnte trasladaron a Roa Hurtado al Hospital Nacional Sergio E. Bernales, donde los médicos confirmaron su deceso.
Según fuentes policiales, el suboficial Brandon Roa Hurtado se hallaba cumpliendo una sanción disciplinaria de suspensión de sus funciones por seis meses y lo investigadores presumen que ese hecho tendría relación con su asesinato.
Silenciado
De otro lado, un desconocido asesinado al parecer acuchillado en otro lugar, fue abandonado metido dentro de un improvisado ropero de madera e incendiado hasta quedar reducido a cenizas en el Paradero 12 de la Avenida Las Flores, en el distrito de San Juan de Lurigancho-SJL.
Los vecinos del sector al remover los restos del mueble se encontraron con el macabro hallazgo: un cadáver calcinado, irreconocible, entre los escombros del mueble quemado.
Al cierre de este despacho, se desconocía la identidad de la víctima, pero algunos vecinos dijeron haber sido informados por gente vinculada a los asesinos, que se trataría de un sujeto que pertenecía a una banda de hampones, a la que había traicionado convirtiéndose en confidente de otro grupo delictivo.
