Por: Eduardo Farah H. / Comenzaron las diferencias en el Congreso de la Republica con el Ejecutivo, aquí existen diferentes puntos de vista y obviamente se tiene que evitar que dichos puntos lleguen a colapsar. Hay quienes creen que en los diversos países las personas deben vivir gratis, esto quiere decir que no se pague en las escuelas, las universidades, la vivienda y que los trabajos como en Cuba deben tener un sueldo de UD$ 20.00 al mes, también hay quienes creen que si se deben pagar tanto la enseñanza en los colegios, las universidades y la vivienda.
Ambas posiciones, para muchos tienen razón de existir, pero si analizamos, vamos a encontrar que la mejor forma de vivir es la que tienen los países nórdicos como Suecia, Finlandia, Noruega, Alemania, Francia y ahí encontrarán una mezcla que permite que los ciudadanos de estos países tengan casi el mismo punto de partida y lo han demostrado en la pandemia que se está viviendo. Fuera del problema italiano los demás países han podido sobrevivir al ataque feroz de esta pandemia.
En nuestro caso, la gran mayoría de peruanos que vienen de otras ciudades a Lima, cualquiera sea el medio de transporte que utilice, ve la pobreza que se vive en los cerros que rodean la ciudad, mucha de esa pobreza es modo de vivir, pero otra parte de la pobreza es necesidad de vivir. La pobreza que gracias a Dios la remontamos de 74% a 22% se debe porque la política económica del país hace 15 años se decidió a tomar el camino más fácil para su desarrollo, hoy en el Perú tenemos un grave problema de salubridad y de educación.
Creo firmemente que los Panamericanos fue un lindo espectáculo, pero si no se hubiera gastado el dinero en esos juegos y se hubiera invertido esa suma en postas médicas, hospitales y escuelas, Lima sería otra ciudad y este evento de la pandemia podría haber sido enfrentado con soluciones mucho más prácticas, con equipos médicos en óptimas condiciones, con mejores implementos para el trabajo diario como protectores, departamentos de UCI, etc. y no pasar por la penosa historia de ver a nuestros conciudadanos esperar la muerte en una silla de hospital.
Que esto nos enseñe, a que los impuestos que tanto trabajo da cobrarlos, sirvan para que los ciudadanos puedan atenderse tanto en una posta médica como en un hospital ágilmente, con resultados excelentes para su salud
Muchos de nosotros pensábamos que la enfermedad que estamos enfrentando era una gripe sin importancia, hoy sabemos la gravedad que estamos enfrentando, con lamentablemente cerca de un millón de personas que han perdido la vida en nuestra planeta, ojalá puedan resolver la creación de una vacuna o por lo menos la creación de un sistema que pueda salvar la vida a mucha gente.
En nuestro país han pasado 66 días de la pandemia y aún no encontramos que las personas crean en el sistema de la distancia social, de lavarse las manos, de cubrirse el rostro, de dejar de salir a tomar a la calle, de dejar de explotar a la gente con la venta de medicamentos sobrevalorados, todo esto tiene que arreglarse, nuestros hijos tienen que entender que cada día el mundo es mucho más complejo de vivir, y que los desafíos van a ser cada día más difíciles de superar. Esperemos que se entienda.
