Por: Phillip Butters / Q.E.P.D. Adolfo Mamani Tacuri, 57 años muerto en AQP

Por: Phillip Butters / Este fin de semana pasado Celia Capira, esa mujer que correteó desesperada al Presidente de la República, rogándole porque vaya a la carpa donde estaban los pobres muriéndose, se hizo conocida en todo el Perú y se convirtió en el emblema del sufrimiento de decenas de miles de familias que ven cómo un integrante muy querido por ellos, se va al cielo. Eso le ha pasado a la Celia, ha muerto su esposo Adolfo Mamani Tacuri, hombre de 57 años, padre de tres hijos. Ella, desesperada supuestamente consiguió la atención de parte del Gobierno, y habían dicho, inclusive, el día de
ayer por la mañana, cuando fue a entregar el desayuno para su esposo, que él estaba estable, que él estaba mejorando, que él estaba bien. Bueno, es la versión oficial del Gobierno que había dado a los medios para “limpiar” la imagen del Presidente Vizcarra. Pero lo que pasó era todo lo contrario, el marido estaba grave y recién ayer al mediodía, dijeron que su esposo había muerto. La desesperación de la señora se puso de manifiesto en una entrevista tristísima, dada al Grupo RPP y realizada por el doctor Elmer Huerta. El doctor Huerta y RPP hacen con sus ondas lo que mejor les parece, pero el hecho es que en esa entrevista el mencionado doctor se muestra “empático”, “preocupado”, “dolido” y “consternado” para con la triste realidad de la señora Celia. Es más, dijo que la gente del hospital Honorio Delgado, tendría que poner un psicólogo o un psiquiatra para que la señora le diga a sus hijos, de la mejor manera, que su padre, ya no estará más con ellos. La pregunta cae de madura ¿Recién se dan cuenta en esa casa y emisora periodística que dice que “genera confianza por todos los medios” que el Gobierno es un desastre en la lucha contra el Covid-19? Supuestamente ese señor es un ¡Profesional de la salud! ¿Acaso no se presenta como especialista en epidemiología? ¿Este señor no sabe sumar ni restar? Digo, hacer de la muerte un show es muy sencillo para generar rating y hacerse el bueno. La pregunta que cae de madura es ¿Y cuándo se han dado cuenta que estamos viviendo una desgracia?, en una situación de cataclismo nacional, en una situación de desastre nacional. Todos estos epítetos que usted lee en estas líneas son dados por el Colegio de Abogados de Arequipa, la Cámara de Comercio de Arequipa, por los sindicatos de los hospitales del MINSA o de EsSalud. Por supuesto, en el Grupo RPP se dedican a ser escuderos de la señora Molinelli, del señor Vicente Zeballos y por supuesto, del Ministro Zamora. ¿Recién ahora que hay un show de la noticia, se dan cuenta que el Perú vive una desgracia? ¿Hasta qué punto los medios han sido responsables de esta desgracia, ¿porque probablemente este señor Mamani Tacuri, salió a la calle pensando en que ya había “meseta” y que la cosa estaba mejorando, como muchas veces hemos escuchado de la voz de los Ministros, que nunca han sido interrumpidos y aclarados por los conductores de medios que son los que, en buen romance, son conocidos como las “Waripoleras moqueguanas”. Digo, esa empatía, esa preocupación, no les hace utilizar el cerebro, ya que corazón no tienen, en darse cuenta que todo lo que ha hecho el Gobierno es un desastre. Señores de RPP ¡infórmense! El desempeño de la pandemia en el Perú, para lo que con el Gobierno respecta, ha sido ¡el peor desempeño del mundo”. Si sinceran las cifras vamos a tener una mortandad muy superior a la de cualquier país del mundo per cápita. ¿Eso no lo saben? O no lo quieren saber. Es una desgracia lo que le ha pasado a la señora Celia Capira, ante la indolencia del Presidente de la República y de todas las autoridades e inclusive del señor Cáceres Llica, que seguramente va ser enjuiciado por negligente, pero sería bueno que se pongan a pensar que estas desgracias les podría pasar a las familias de sus colaboradores o empleados para decirlo más directamente. Reitero lo escrito en estas líneas, la labor de los medios de comunicación ha sido rastrera y vil. Sería bueno que se den cuenta del daño que están haciendo, al engañar a la gente con la estupidez ésta de que “la cosa está mejorando”, cuando lo que está pasando es que cada día estamos peor, esa verdad es inocultable. ¿Y ahora qué dirán las encuestas?