El presidente de Armenia, Armen Sarkisian, dio a conocer su renuncia este domingo por los «tiempos difíciles» en el país.
El presidente de Armenia, Armen Sarkisian, cuyo rol es protocolario, reveló su renuncia este domingo, indicando que su oficiona es incapaz de influir en la política del país en medio de la crisis.
«Lo he estado pensando durante mucho tiempo y he decidido dimitir tras cuatro años de trabajo en activo como presidente”, declaró Sarkisian en un comunicado, en el que añadió que “el presidente no cuenta con las herramientas necesarias para influir en los procesos importantes de la política exterior y nacional en tiempos difíciles para la gente y en el país», dijo.
Sarkisian se encontró el centro de la crisis política interna, la cual se detonó el año pasado a raíz de la guerra entre Armenia y su viejo rival Azerbaiyán por el control de la región de Nagorno-Karabaj.
Su rol era protocolario y el Poder Ejecutivo corresponde principalmente en el primer ministro Nikol Pashinyan.
Ambos difirieron sobre la decisión de destituit al jefe del Estado Mayor del Ejército luego de la guerra y en medio de protestas donde se concentraron miles de personas.
«Espero que puedan aplicarse los cambios constitucionales y que el próximo presidente y la administración presidencial puedan operar en un entorno más equilibrado», agregó el comunicado.