Pero, ministro de defensa ruso asegura que no atacaron la planta y culpa del hecho a saboteadores ucranianos
El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, denunció ayer que la planta nuclear de Zaporizhzhia, ubicada en la ciudad ucraniana de Energodar, se incendió por varias horas el viernes luego de haber sido atacada por las fuerzas invasoras de Rusia, reconociendo luego que no había sido destruida y que seguía funcionando.
La Zaporizhzhia NPP (Nuclear Power Plant) fue construida por la Unión Soviética en 1979 y se encuentra en la zona de estepa de Ucrania, en la orilla de un embalse de agua de la ciudad de Kakhovka, situada a unos 71 kilómetros al nordeste de Kherson. Es la planta nuclear más grande de Europa y una de las mayores de todo el mundo.
Es operada por la empresa estatal NNEGC Energoatom y en sus piscinas de enfriamiento hay cientos de toneladas de combustible nuclear altamente radiactivo, razón por la cual tres de ellas han sido cerradas cuando comenzó el conflicto armado con Rusia. El incendio se desató en uno de esos seis reactores VVER-1000 que se encuentran en la central.
Rusia culpa a saboteadores
Rusia negó haber atacado la central de Zaporizhzhia con tanques, artillería y cohetes, y denunció que el incendio en esta instalación fue una “provocación” llevada a cabo por un grupo de sabotaje ucraniano, para tratar de culpar a Moscú.
“La provocación «demuestra la intención criminal» de Kiev » la completa pérdida del control del presidente Zelenski sobre las acciones de los grupos de sabotaje ucranianos con mercenarios extranjeros», señaló el embajador ruso ante NN.UU., Vasili Nebenzia, en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad para abordar el incidente.
Según Nebenzia, las tropas rusas controlan la instalación desde el pasado 28 de febrero y anoche fueron atacadas por un “grupo de sabotaje ucraniano”, que tras ser repelido por efectivos del Kremlin habría incendiado antes de huir el edificio que se vio en llamas.
G7 insistirá en sanciones
De otro lado, los países G7 que reúne a igual número de potencias industrializadas anunciaron que “seguirán imponiendo sanciones severas en respuesta a la agresión rusa”, en un comunicado suscrito por los ministros de Relaciones Exteriores de ese grupo formado por Estados Unidos, Canadá, Francia, el Reino Unido, Alemania, Italia y Japón.
El comunicado también insta a Rusia a poner fin a sus ataques “en las inmediaciones de las centrales nucleares ucranianas”, tras los bombardeos rusos que la madrugada del viernes provocaron un incendio en la central de Zaporiyia, la mayor de Europa, sin consecuencias en los niveles de radiactividad.
Tras reunirse en Bruselas, los ministros saludaron en el comunicado el anuncio de un acuerdo entre Moscú y Kiev para la creación de un corredor humanitario como “un primer paso importante” e instaron a implementarlo “de forma fiable y con rapidez”.
Incautan megayate
En cumplimiento de la política de sanciones a los oligarcas rusos, diseñada por la Unión Europea, la policía italiana incautó el viernes un yate de propiedad de Alexey Mordashov, el oligarca más rico de Rusia. Se trata del yate “Lady M”, de 65 metros de eslora, incautado en el puerto de Imperia, al norte de Italia, según la fuente.
Según los medios de comunicación italianos, el Lady M fue construido por los constructores navales estadounidenses Palmer Johnson en 2013. La revista Forbes dice que tiene un valor de 27 millones de dólares.
Mordashov construyó su riqueza como productor de acero ruso Severstal (CHMF.MM). Teniendo en cuenta los activos de toda su familia, Forbes estima que Mordashov tiee un patrimonio estimado de 29.100 millones de dólares antes de que llegaran las sanciones, lo que le convierte en el hombre más rico de Rusia.
