En Rusia se anunció esta y otras medidas con las que pretende frenar el avance del COVID-19.
En Rusia, concretamente en la república de Tatarstán, la cual cuenta con una población de 4 millones de habitantes aproximadamente, se prohibirá a toda aquella persona que no esté vacunada contra el COVID-19 hacer uso del transporte público, así lo anunciaron este sábado las autoridades locales.
Esta medida entrará en vigencia dentro de las dos próximas semanas, informó el presidente de Tatarstán, Rustám Minnijánov, a través de un comunicado. Y es que muchas personas se quejaron de las infracciones relacionadas con el uso de las mascarillas en el transporte público, así como también indicaron que es imposible guardar la distancia social.
Por tanto, a partir del 22 de noviembre se pedirá mostrar el carné de vacunación, a toda persona mayor de 18 años, antes de abordar el transporte público. En el caso de las personas que no se han podido vacunar por razones médicas, estas deberán mostrar el justificante antes de subir.
Por otro lado, el presidente de Tatarstán recomendó a las universidades hacer los mismo con sus alumnos mayores de edad. «Me van a criticar, pero vamos a tomar medidas. No nos queda otra», expresó Minnijánov.
Tatarstán es la primera región de Rusia que impone estas restricciones, a las personas no vacunadas contra el COVID-19, a la hora de hacer uso del transporte público.
Y es que Rusia registró este sábado 41.000 casos diarios de COVID-19, su máximo desde que inició la pandemia en marzo del 2020. Hasta el momento, son 49 millones de personas las que han recibido la pauta completa de la vacuna, lo que equivale a un 42.7 % de su población inmunizada.
Fuente: Andina.