Qali Warma utilizó S/374 millones en proveedores que no cumplieron con el suministro de raciones alimenticias. Se intentó otorgarles un plazo adicional, pero ahora se procederá a cancelar los contratos
El ministro de Desarrollo, Julio Demartini, presentó en febrero pasado la campaña «Combinación perfecta» de Qali Warma. Sin embargo, esta iniciativa resultó ser engañosa, ya que se brindó apoyo a proveedores que no cumplieron con los requisitos necesarios, lo que dejó a muchos niños en situación de inseguridad alimentaria.
“Que nuestros escolares se alimenten correctamente y que sus padres tengan la tranquilidad de que estamos pensando en sus hijos y que cada día queremos mejorar para que crezcan sanos como corresponde. Que este 2024, y la alianza estratégica que involucra a varios actores, sea un año de partida para que cada día la conformación de los alimentos escolares sea más nutritiva, de mejor calidad y agradable” comentó el funcionario.
Se destinaban S/3,74.1 millones para proporcionar bebidas nutritivas y alimentos sólidos a 1’167,788 estudiantes de 4,590 escuelas públicas en 14 regiones. En Lima Metropolitana y El Callao solamente, se tenía previsto atender a 626,591 estudiantes de un total de 2,250 colegios.
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El programa Qali Warma lanzó la convocatoria para el Proceso de Compras 2024 el 17 de enero de 2024, en la modalidad de raciones, retomando esta práctica después de la pandemia. Los contratos fueron firmados en febrero. Según Projusticia, el seis de marzo, Mónica Moreno Saavedra, directora ejecutiva del programa social, emitió la Resolución de Dirección Ejecutiva N° D000212-2024-MIDIS/PNAEQW-DE, modificando los requisitos.
«La decisión de modificar los requisitos surge de las dificultades planteadas por los proveedores para suministrar el alimento bebible preparado de consumo inmediato, debido a la falta de equipamiento instalado a pesar de haber realizado la investigación en el mercado de máquinas de preparación de bebidas y su posterior adquisición, según se evidencia en las solicitudes de cotización y órdenes de compra. Esta modificación se propone temporalmente para el primer ciclo de 20 días de atención en 21 ítems, con el fin de no afectar el servicio alimentario escolar», indicaba la resolución emitida por Mónica Moreno Saavedra, directora ejecutiva del programa social.
Las compañías a cargo afirmaron, bajo juramento, tener los equipos adecuados para el tratamiento térmico y el mecanismo de dosificación de flujo continuo. Sin embargo, esto no se cumplió. En el colegio Nuestra Señora del Carmen, abastecido por el Consorcio R Y J en San Martín de Porres, se reportaron olores fuertes en las raciones, lo que resultó en que un niño tuviera que ser llevado a un centro de salud.
