Flores-Araoz afirma que ente electoral no debería tomar ninguna resolución mientras no termine con las impugnaciones
Por Roberto Sánchez R.
El abogado Antero Flores-Araoz, expresidente del Congreso de la República, señaló que el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) ha mantenido un sesgo político establecido en el manejo de este proceso electoral y mantiene un resultado incierto, que estaría viciando la transparencia de la contienda electoral.
¿Qué opina de la situación que surge para el candidato Pedro Castillo, tras la revelación de la Fiscalía en el caso de los Dinámicos del Centro?
La Fiscalía, si encuentra responsabilidades, tiene que denunciarlo al Poder Judicial, que es el único organismo que puede sancionar, mientras que el Ministerio Público tiene a su cargo la investigación y la acusación. Tengo entendido que está en el proceso de investigación. Ahora, si esto se diera lógicamente antes de la proclamación, cosa que veo muy difícil, es el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) el que tiene la palabra, pero sabemos que es una entidad que tiene una mirada sesgada políticamente. Yo diría menos que mirada, parecería representante del instituto sobre ceguera, porque no ve, no oye y no habla.
¿Le parece difícil que se dé una proclamación en estos momentos de tantas investigaciones judiciales?
Ocurre que estamos viendo que a la autoridad electoral no le está dando la gana de admitir las pruebas de las irregularidades que hay. En consecuencia, cómo va a emitir un fallo con criterio de conciencia, si no ha tenido conciencia siquiera para admitir las pruebas. Si alguien tiene que juzgar las pruebas y no quiere admitirlas, evidentemente tiene un sesgo político preestablecido que vicia el proceso. Porque si no hubiera nada que esconder, a qué tanto miedo de exhibir los documentos que son públicos.
Ante tantas evidencias ignoradas por las autoridades electorales, ¿podríamos deducir la existencia de un fraude oculto?
Si hay una irregularidad es una. Y si hay dos irregularidades, siguen siendo dos. Pero cuando hay sospechas de que hay miles de irregularidades, ahí las cosas cambian. No es lo mismo robar un sol de una bodega que robar un sol de todas las bodegas del Perú. Ya da la impresión de que hay un concierto de voluntades para cometer estas anomalías y, cuando hay tantas, existiría la voluntad de cambiar la decisión popular, y evidentemente eso hace que se perciba un olor a fraude.
Esta situación de desconfianza de la población en los órganos electorales, ¿podría llevar al JNE a decidir la nulidad de la segunda vuelta?
Conociendo la forma en que ha estado actuando el Jurado Nacional de Elecciones, eso es algo así como pedirle peras al olmo. Su inhóspito proceder no me lleva a pensar que sus próximas decisiones vayan a ser correctas. De momento ha sido muy cuestionado y cuestionable. En consecuencia, no tengo elementos para pensar que vaya a rectificarse.
¿Qué entidad podría frenar estas acciones de perjuicio para la voluntad popular? ¿Sería la apática Junta Nacional de Justicia?
Bueno, la Junta Nacional de Justica poco tendría que hacer. En este tema, sería el Ministerio Publico el que haga la investigación; y el Poder Judicial, de ser el caso, la sanción. Si al JNE se le da por proclamar a Pedro Castillo puede pasar cualquier cosa, pero evidentemente no debería tomar ninguna resolución, por lo menos mientras formalmente no haya terminado de resolver las nulidades que están en proceso.
¿Qué opina cuando el señor Pedro Castillo dice que el pueblo peruano quiere una nueva constitución?
No es así. El señor Castillo, en segunda vuelta, ha tenido apenas 8 millones de 25 millones de electores. La señora Keiko ha tenido también 8 millones y algo más. Y existen como 9 millones que no han votado, o sea, el ausentismo. En consecuencia, Castillo no tiene más que el 30 %. Con esa cifra no puede decir que el pueblo se lo pide, porque hay más personas que no han votado por él.
Para variar, ¿qué opina que el fiscal José Domingo Pérez abra una nueva investigación contra Keiko Fujimori?
Ya la verdad me parece que el doctor José Domingo Pérez, más que miembro de la fiscalía especial Lava Jato, parare dueño de alguna lavandería. Ya se nota que pierde objetividad en este tema y todo es lavado de activos, todo es organización criminal y que realmente son exageraciones.