Las cámaras de seguridad captaron cuando los tres individuos encapuchados huían de la casa del coreógrafo
La comunidad de San Martín de Porres se conmueve ante el fatal asesinato del coreógrafo Carlos Iván Espinoza Huerta, de 41 años, el pasado sábado.
Espinoza, un residente de más de una década en la calle Guillermo Ramsey de la urbanización Condevilla, nunca imaginó que un encuentro con supuestos «amigos» desencadenaría una tragedia inimaginable.
Delincuentes habrían ultimado al coreógrafo para robarle más de 13 mil soles. (Foto: TVPerú Noticias).
«Él era una persona que confiaba en todos, creía que todos compartían su misma bondad, pero lamentablemente se equivocó. La vida le jugó una triste pasada», expresó una vecina que prefirió mantener su identidad en reserva.
Según los informes preliminares, tres individuos de origen desconocido habrían ingresado a la vivienda de Espinoza con motivos más oscuros que una simple visita. Los invasores inmovilizaron al coreógrafo, utilizando una correa, mientras sometían al compañero de Espinoza a una atadura similar.
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Las cámaras de seguridad de una casa vecina se han convertido en una pieza clave para la investigación. Puesto que, lograron captar el momento exacto en que los tres individuos encapuchados huyen de la escena del crimen. En su apresurada fuga, se llevaron consigo la suma de 13 mil soles en efectivo, así como prendas de vestir y teléfonos celulares pertenecientes a las víctimas.
Los resultados de la necropsia revelan que la causa del fallecimiento de Iván Espinoza fue asfixia y estrangulamiento, un desenlace trágico que ha dejado a la comunidad consternada y en busca de respuestas.
