A la ex alcaldesa se le acusa de asociación ilícita, colusión, lavado de activos, falsedad genérica y falsa declaración en procedimiento administrativo.
El Primer Despacho del Equipo Especial Lava Jato, del cual, está a cargo el fiscal José Domingo Pérez quien ha hecho la solicitud de los 39 años de la pena privativa de la libertad en contra de la ex alcaldesa de Lima Metropolitana, Susana Villarán.
La investigación del fiscal está basada en que Villarán habría organizado una red criminal en la que pudo haber recibido más de 10 millones de dólares en ingresos y aportes ilegales por parte de la constructora Odebrecht y OAS. Tales empresas habrían aportado a la campaña “No” a la revocatoria en el 2013 y también a la reelección para las elecciones de la alcaldía de Lima en la que no logró ser elegida en el 2014.
No lo hizo sola
En la acusación están implicados el ex gerente municipal, José Miguel Castro, ex gerente de Promoción e Inversión Privada de la Municipalidad de Lima, Domingo Arzubialde, y Gabriel Prado. A ellos se les dará una condena entre 9 a 25 años de prisión.
Para esto, ellos decidieron que OAS tendría la concesión del proyecto Línea Amarilla en la que ampliarían entre 30 o 40 años más de peaje. Sin contar la subida de estos incluyendo el descontento de los ciudadanos.
Declaraciones
Asimismo, cuando iniciaron las investigaciones, una de las palabras más indignantes por parte de la ahora ex alcaldesa es que haya mencionado su falta de arrepentimiento. “No me arrepiento de haber tomado la decisión que tomé en ese momento tan grave de la ciudad”, dijo durante una audiencia de prisión preventiva en su contra.
Agregó además que no era de las personas que se fugan ni evaden la justicia. “Soy de las personas que siempre dan la cara, por dignidad, porque tengo tres hijos y seis nietos a los que siempre les digo la verdad y porque hay mucha gente que me votaron y creen en mi palabra”, sentenció.
