Mientras Venezuela retoma clases presenciales que fueron suspendidas hace 19 meses
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, reconoció este lunes un “rebrote” de contagios de COVID-19, luego de detectarse un aumento sostenido de casos durante el último mes y medio, y advirtió que habrá más restricciones para los 1,2 millones de rezagados que aún no se han vacunado.
“Vamos a ser más duros y exigentes para que todos se vacunen, porque ese es el segundo gran instrumento que tenemos”, agregó Piñera.
Chile registra actualmente el mayor número de casos activos desde julio de este año, con 9.973 pacientes con capacidad de esparcir el virus.
Si bien ya la semana pasada el ministro de Salud, Enrique Paris, afirmó que los casos han aumentado en más de un 40 %, descartó de plano que se trate de una “tercera ola” de COVID-19, pues las cifras no alcanzan las dimensiones de abril y mayo pasados, cuando se registraron más de 8.000 casos diarios.
En Bolivia
De otro lado, Bolivia registró por cuarta semana consecutiva un incremento de contagios de la COVID-19, lo que llevó al Ministerio de Salud, a advertir que el país enfrentará una cuarta ola de la pandemia.
La nación sudamericana reportó un promedio de 256,4 casos diarios durante la última semana de septiembre, cifra que ascendió a 352,4 casos la primera semana de octubre; 365,7 la segunda; 390,3 la tercera, y 466,4 la cuarta, según datos oficiales.
En Venezuela
Las escuelas de Venezuela, luego de 19 meses sin clases presenciales, volvieron a recibir estudiantes este lunes tras 19 meses sin actividades presenciales por la pandemia de COVID-19, aunque sin una afluencia masiva por las regulaciones sanitarias y demoras en las reparaciones de algunas estructuras.
El regreso a clases presenciales coincide con el inicio de la vacunación a niños de 12 años en adelante. De hecho, el presidente Nicolás Maduro anunció el domingo que esta semana prevén incluir escuelas y liceos en los centros de inmunización contra el COVID-19.
El país petrolero arrancó en febrero pasado la aplicación de la vacuna rusa Sputnik V y la china Sinopharm, ambas de dos dosis. Más tarde se incorporó la cubana Abdala, cuyo ciclo de inmunización requiere tres dosis.