Así lo informó Contraloría
Frente a la advertencia sobre la presencia del fenómeno «El Niño», el Gobierno asignó 4.116 millones de soles para hacer frente a las consecuencias climáticas. Sin embargo, hasta octubre, solo se ha ejecutado el 19,2% de este presupuesto, según el informe de la Contraloría.
La preocupación principal radica en el lento progreso, especialmente dado que no existe garantía de que el dinero sea completamente utilizado, ya que, como señaló el contralor Nelson Shack, solo se ha comprometido la mitad de los fondos, es decir, el 52.9%.
De cada S/ 10 destinados para abordar la situación de emergencia causada por El Niño, el gobierno nacional debe emplear 8, aunque a pesar de ser el principal responsable del presupuesto, sus ministerios no muestran un fuerte nivel de compromiso.
Un caso es el del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, que, pese a recibir una asignación de S/ 1,195 millones, únicamente pudo desembolsar el 9.5% de esa suma.
Este ministerio juega un papel crucial al ser responsable de asegurar el abastecimiento adecuado de alimentos. Asimismo, el sector de Vivienda, Construcción y Saneamiento presenta una baja ejecución, con tan solo el 6.8% de los 777 millones de soles que se le asigna.
Según Karla Gaviño, experta en gestión e inversión pública, es fundamental que el gobierno mejore su habilidad para asignar recursos y formalizar acuerdos. «Hay un tema de no tener claridad de cuáles son las principales acciones que la administración pública, a lo largo de los tres niveles de gobierno tiene que enfatizar», enfatizó.
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El fragmento que proporcionaste indica que tanto las regiones como los municipios tienen una baja ejecución de sus presupuestos. Según la Contraloría General de la República, los gobiernos regionales han recibido un total de S/ 402 millones, pero solo han gastado el 9.8% de ese dinero hasta el momento.
En cuanto a los gobiernos locales, que han recibido S/ 343 millones, han avanzado en el gasto hasta el 38.8 %. Esta baja ejecución sugiere que los fondos asignados a estas entidades no se están utilizando de manera efectiva o que hay demoras en la implementación de proyectos y programas.