El reconocido boxeador denunció que extorsionador le dejó una granada, balas y el mensaje: “evítate los problemas, cuida tu vida”.
El boxeador peruano, Jonathan Maicelo, denunció que extorsionadores le dejaron amenazas de muerte en su restaurante, ubicado en la primera cuadra de la avenida Gran Chimú en San Juan de Lurigancho.
Indicó que le dejaron un paquete que contenía una granada, varias balas y un mensaje amenazante.
“Ya sabes que tienes que tocar la puerta dejando tu ingreso, evítate los problemas, cuida tu vida”. Esta carta fue enviada a Maicelo por un sujeto que se identifica con el alias de “Loco Aroni”.
Este sujeto, con el nombre de Renée Jesús Aroni Lima, además, es el principal sospechoso del crimen del hijo de Carlos Burgos, exalcalde de San Juan de Lurigancho.
Renée Aroni Lima también es sindicado de ser el cabecilla de la banda criminal “Los Malditos de Huáscar”.
La carta inclusive brinda tres números de celulares para que el boxeador se comunique para coordinar el pago de la extorsión.
Maicelo contó para el noticiero 24 Horas, que el extorsionador se hizo pasar como cliente. Este se provechó que había gran cantidad de comensales para ingresar al restaurante y dejar la bolsa en la puerta.
Jonathan Maicelo indicó que no tiene a ningún sospechoso. Ya que afirma no tener problemas con nadie. Cuestionó que sea víctima de una extorsión pese a que su restaurante tiene solo cinco días de inaugurado.
“Uno le pone punche, corazón y ganas. No va a venir alguien que se la lleve de gratis”, dijo y pidió a las autoridades que vigilen más la zona.
Narró que, al encontrarse con la bolsa, se alejó de todos para revisar su interior. Al darse cuenta de las balas y granada, la dejó a un lado para no poner en riesgo a todos los que se encontraban en su local.
“Cerré el paquete y lo dejé a un lado para resguardar a la gente que estaba haciendo cola, a los comensales y a mis trabajadores. Me mantuve a distancia de eso y llamé a la Policía para que se lleve esa vaina”, añadió Maicelo.
“Nunca he tenido problemas con nadie. Yo creo que simplemente son gente que se dedica a eso y hay que atraparlos. A pesar de que soy un tipo loco, me mantuve con calma y sigo con calma. Sigo tranquilo, que pase lo que tenga que pasar”, finalizó el boxeador.