El nuevo Gobierno talibán no cede pese a las críticas por sus límites a la educación femenina en Afganistán y mantiene su postura de no permitir reabir las escuelas de educación secundaria para las niñas.
Los talibanes reafirmaron su postura de no permitir la reapertura de las escuelas de educación secundaria para las niñas en Afganistán, pese a diversas críticas como la realizada hoy por la organización Amnistía Internacional (AI).
En tres de las 34 provincias afganas, exactamente las norteñas Sar-e-Pol, Balkh y Kunduz, diversas escuelas secundarias reabrieron, pero el portavoz talibán Bilal Karimi remarcó a Efe que lo hicieron sin permiso e ilegalmente.
«Hasta el momento no hemos hecho ninguna declaración oficial ni hemos tomado ninguna decisión para ordenar la reapertura de las escuelas de niñas en ninguna zona o provincia específica. En algunas zonas las clases se reanudaron extraoficialmente, sin ninguna orden ni decreto oficial«, sostuvo el portavoz.
Debido a la postura de los talibanes, Amnistía Internacional publicó un comunicado a los fundamentalistas a «permitir que las niñas regresen de inmediato a las escuelas».
«En la actualidad, a las niñas en Afganistán se les prohíbe regresar a la escuela secundaria. En el país, los derechos y aspiraciones de toda una generación de niñas son rechazados y aplastados«, comentó la secretaria general de AI, Agnés Callamard, y calificó la decisión de los talibanes de «discriminatoria, injusta» y de violar el derecho internacional.
Por otro lado, la comunidad internacional pidió cortar los fondos de ayuda con la llegada a los talibanes al poder el pasado 15 agosto, que garantice la financiación en el sector educativo afgano, ya que de no hacerlo estarían negando «a millones de estudiantes afganas el derecho a la educación«.