El Tottenham Hotspur se dejó dos puntos y pagó cara su falta de efectividad ante el Newcastle.
En la previa del partido, el Tottenham de Mourinho inició con su tridente conformado por Lucas Moura, Kane y Son. Los spurs aún esperan con ansias la incorporación de Reguilón y de Bale, que lo hizo atentamente desde la grada. En cambio, el técnico del Newcastle utilizó a Joelinton y Wilson como referentes de ataque.
En la primera parte, el Newcastle tuvo suerte porque Darlow salvó a su equipo hasta en tres ocasiones en lo que era un apabullante dominio local. Luego, Son habilitó a Kane, que con el traje de asistente, le regaló el gol a Lucas Moura. Por ello, las urracas quedaron indefensos y no inquietaron la portería de Lloris.
En la segunda parte, el Tottenham parecía sentirse cómodo en su ligera ventaja, dominando el control del balón y negando cualquier contraataque. Por consiguiente, Kane tuvo cerca el gol pero al final lo iba a terminar pagando caro. Solo la falta de puntería del Tottenham evitó que el partido se cerrara antes y con el escueto 1-0 se creció el equipo de Steve Bruce.
Por último, Dier desvió con el brazo un testarazo de Carroll y el árbitro señaló la pena máxima. El enfado de Mourinho estaba más que justificado. Wilson convirtió el tanto que valía un punto que no merecieron en ningún momento del encuentro. Finalmente, José Sacramento fue expulsado del partido aunque las imágenes no lo dejan claro.