Esta nueva tecnología desarrollada en Perú (UNI) crea “supercapacitores” que, a su vez, recoge energía de manera totalmente natural.
Después de haber ganado en la convocatoria “Incorporación de Investigadores”, estos investigadores de la Universidad Nacional de Ingeniera (UNI) recibieron un financiamiento en convenio con el Banco Mundial, a través de PROCIENCIA, y gracias a este, desarrollan sistemas de almacenamiento de energía, también llamados “supercapacitores”. El artefacto permite cargar con suma rapidez cualquier clase de dispositivo eléctrico como hervidores de agua, celulares, enrutadores de internet hasta vehículos eléctricos menores.
Como se recuerda, los artefactos eléctricos son más amigables con el medio ambiente, más aún los de transporte urbano, en este caso no producen gases de efecto invernadero, por ende, no afectan al planeta. Adicionalmente, el uso de desechos para la generación de materiales carbonosos permite obtener supercapacitores de bajo costo y con menor impacto ambiental.
“Para esta tecnología estamos empleando desechos como: la coronta del maíz morado, cáscaras de naranja, cáscara de pistacho, polos de algodón en desuso, corona de piña, entre otros, que son aprovechados mediante tratamiento térmico para generar carbón como material base o “estrella” que permita almacenar mucha carga, por ello venimos explorando diversos materiales”, manifestó la doctora Angélica María Baena Moncada, Coordinadora técnica del proyecto. “En un futuro, con los supercapacitores que venimos trabajando, un celular podría ser cargado en segundos, por ello es importante este sistema, ya que busca facilitar la vida de las personas y elevar la calidad de vida de aquellos que viven en zonas alejadas”, enfatizó la investigadora de la UNI.