No fue el dinero lo que hizo que Kylian Mbappé se quede, la preferencia por su país fue más.
Lo cual llevó a dictaminar a Kylian Mbappé a quedarse en el París Saint-Germain otros 3 años más fue, afirmó el delantero francés este lunes, su voluntad de continuar aún en Francia —”mi país”, insistió en numerosas ocasiones— y de llevar a su equipo a las más altas cotas del deporte.
“Entiendo la decepción de los aficionados del Madrid, empero espero que comprendan que haya decidido quedarme en mi territorio, pues soy francés y, como he dicho, en tanto que francés tengo triunfas de avanzar una época aquí y de llevar a Francia y a este club a la cima”, mencionó Mbappé en un mensaje a los madridistas en sus primeras declaraciones a la prensa a partir de que, la noche del sábado, anunciara frente a los seguidores del club parisiense su elección de quedarse y rechazar la oferta del club madridista.
“Todo el planeta sabía qué hace un año me quería ir y que estaba íntimamente convencido de que [el Real Madrid] era la mejor elección posible”, añadió en otro instante de la rueda de prensa celebrada en el Parque de los Príncipes junto al mandatario del PSG, Nasser Al-Khelaifi. Sin embargo, recalcó, el “contexto” es hoy “diferente”, en diferentes planos: “En el deportivo, sin embargo, además en el privado”. Y más que nada, señaló, hay un lado sentimental: Francia “es un territorio en el cual deseo vivir, en el cual deseo envejecer, al que volveré una vez que acabe mi carrera”, insistió. Además, comentó, el “proyecto deportivo ha cambiado” y el proyecto del PSG le dio “ganas de continuar”.
“Siento que mi historia aquí no ha culminado y que me quedan todavía buenos capítulos por redactar aquí”, añadió. Al Khelaifi afirmó además que la elección no estuvo motivada por dinero. “El dinero para Kylian no es lo de mayor relevancia, lo más relevante es el plan deportivo, triunfar. Hay otros clubes, en España, dispuestos a costear más”, mencionó a la pregunta de un periodista español.