Cantautora apurimeña lamenta partida de maestros por Covid-19
Cantautora apurimeña Josefina Ñahuis señala que el covid-19 se ha llevado a maestros del instrumento vital para el acompañamiento de la música andina y que falta promover el interés de los jóvenes músicos en el instrumento. Artista prepara su sétimo álbum.
Desde hace 17 años, cuando inició su carrera musical, el canto de Josefina Ñahuis florece mejor con el acompañamiento de guitarras y acordeones. Esta instrumentación es importante para el folclor tradicional de la sierra norte, centro y sur, regiones como Áncash, Apurímac, Cusco, Ayacucho, Arequipa, Huancavelica, Puno y Junín lo saben. Huainos y carnavales suenan mejor.
Sin embargo, a la intérprete nacida en Chincheros, Apurímac, le preocupa que la pandemia del covid-19 se haya llevado a varios cultores del acordeón. A ello se suma el poco interés entre los jóvenes en el instrumento, debido, cree, a lo difícil que representa su dominio.
“Es oportuno promover que la nueva generación cultive o aprenda a tocar distintos instrumentos del acervo andino, en especial a ejecutar el acordeón”, opina Ñahuis.
Conocida también como La voz de oro, la artista apurimeña presentó el mes pasado, por el bicentenario de la independencia, su versión en quechua chanka del Himno Nacional del Perú.